
Cada persona es un don...
El tema central lo brindó el mensaje que ofrece el Papa Francisco a propósito de la Cuaresma. Dicho mensaje nos invita a " abrir la puerta de nuestro corazón al otro" a reconocer a "El otro como un don"
La primera invitación que nos hace esta parábola (cf. Lc 16,19- 31) es la de abrir la puerta de nuestro corazón al otro, porque cada persona es un don, sea vecino nuestro o un pobre desconocido. La Cuaresma es un tiempo propicio para abrir la puerta a cualquier necesitado y reconocer en él o en ella el rostro de Cristo.
Cada uno de nosotros los encontramos en nuestro camino. Cada vida que encontramos es un don y merece acogida, respeto y amor. La Palabra de Dios nos ayuda a abrir los ojos para acoger la vida y amarla, sobre todo cuando es débil. Pero para hacer esto hay que tomar en serio también lo que el Evangelio nos revela acerca del hombre rico.
Vaticano, 18 de octubre de 2016
Fiesta de San Lucas Evangelista
FRANCISCO
Mesas de trabajo y reflexión personal fueron los mecanismos para meditar el mensaje de Cuaresma, también hubo un momento de adoración en presencia del Santísimo Sacramento.